lunes, 6 de marzo de 2017

Programa de Jordi Evole Con Pablo Iglesias, Vistalegre II


Me gustó el  programa de Jordi Evole Con Pablo Iglesias, Vistalegre II, como me gustan en general todos sus programas . Reconozco que le han dado un poco de caña, pero para eso está, para encajar, no como el Señor Plasma de los Hilillos y  Fugas por Canguitis Crónica.

Los que tenemos un poco de edad, nos acordamos de Urtain “El Morrosko de Cestona”  este hombre, un famoso levantador de piedras, con una fuerza descomunal, fue elegido por su fuerza descomunal para calzarle los guantes por personas que preparaban peleas entre púgiles, comenzaron echándole al ring,  paquetes que se sacudía al primer trompazo que acertaba, pues su pegada era de apisonadora, así consiguió salir victorioso por K. O. en 41 combates, en los que se notaba su corpulencia, su fuerza y su falta de técnica, terminando los asaltos, agotado por dar tantos golpes al aire, aunque le bastaba uno bien colocado para noquear al adversario. Se rumoreo que en ocasiones le ponían un boxeador de cierto prestigio que se dejaba noquear. Y así se hizo Urtain con un nombre y una fama de machacador, mientras no se enfrentó en el  ring  con boxeadores bien curados, con buena técnica y gran pegada. En resumen, después de llenarse hasta la bandera los combates con un Urtain invencible, interesaba, poner las cosas en su sitio, enfrentaron a Urtain con grandes boxeadores llegando el Morrosko a ganar dos veces el campeonato de Europa de pesos pesados gracias a sus puños de titanio y a su dignidad que le impedía doblar la rodilla en medio de una tormenta de castañazos, pero con el tiempo, la falta de técnica le pasó factura  y Urtain, tan fuerte como inocente de los tejemanejes  cayó en picado profesional y anímicamente, retirándose del boxeo y dedicándose a negocios ruinosos y a la bebida, al comprobar que no quedaba en el nada de lo que la habían hecho soñar, el 21 de Julio de 1992, deprimido, enganchado en el alcohol, separado de su familia, Urtain se lanzó desde un décimo piso en el barrio del Pilar de Madrid en el que vivía. Tenía solo 49 años.

Volviendo al tema del programa de Evole, compruebo con satisfacción que a Pablo Iglesias no le echan ni paquetes ni colegas que le "hagan la ola" le ponen entre las cuerdas con púgiles que tienen técnica a la hora de chinchar y van a por él y compruebo satisfecho, su juego de cintura para esquivar las arremetidas, su técnica en las respuestas, su pagada en los ataques y veo que no es fácil marcarle una ceja aunque le produzcan algún moratón y de ninguna manera, contarle hasta diez reposando en la lona con sus ojos fijos en la nada, sin respuestas y con cara de plasma.


Estos combates, le hacen ganar experiencia, saber por dónde le pueden caer las hostias (con perdón, lo requería el guión) y darse de cuenta de los errores cometidos, que en una tertulia entre amiguetes  y coleguitas del alma como las que vemos en TV1 con otros políticos de poco encaje, es más difícil que salgan a la luz, amén de que como hemos podido comprobar por enfrentamientos recientes en Podemos, es mejor lavar los trapos en casa entre personas del mismo partido, cuando en este no existe la disciplina de acato y pleitesía, en otros partidos en que sí se dan estas circunstancias, es más difícil que se produzcan estos enfrentamientos porque simplemente, te apartan del chollo.

¡Buen combate Pablo y buen programa Evole, espero que ninguno de los dos colguéis los guantes y podamos seguir viendo programas serios con invitados que enseñen los dientes y se zurren de lo lindo y no merengadas preparadas como nos ponen en otras cadenas de televisión manipuladas, que solo me producen retorcijones estomacales.

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