Es incomprensible la actitud de las personas que se oponen a la visita de Benedicto solo pensando en la parte económica. Lo que no tienen en cuenta es que sus plegarias estarán en Madrid y rezará por los parados en España y el resto de Europa, rezará también por la situación en Somalia donde son robados los que tienen hambre y sed de justicia y de pan y agua. ¿Es que es más importante una aportación económica, un plato de agua con harina que una oración? ¡No solo de pan vive el hombre! Sus plegarias conseguirán que se multipliquen los panes y los peces gordos, los puestos de trabajo o como mínimo las vocaciones religiosas tan necesarias en el Cuerno de África.
La llegada de Benedicto XVI a Madrid anticipa protestas por el costo que generará su visita en momentos en que España atraviesa severas dificultades económicas.
Los críticos dicen que la visita demandará unos 100 millones de euros, pero el gobierno no quiso dar una cifra de cuánto dinero volverá al Estado. Una portavoz del gobierno dijo que la mayoría del gasto era en seguridad, incluyendo el despliegue de miles de policías extra a las calles de Madrid.
“Un acto de este tipo no tiene cabida en un país con cinco millones de desempleados”, dijo Evaristo Villar, sacerdote de Redes Cristianos, que llevará a cabo una manifestación mañana por la noche, víspera de la llegada del Sumo Pontífice.
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